TÉCNICA
1.- Acostado boca arriba en el piso.
2.- Apoye las manos en el suelo por encima de su cabeza, apoye las
plantas de los pies en el suelo y llévelos lo más cerca de sus gluteos
que pueda.
3.- Inhalando: haga fuerza con sus brazos y con las piernas y levante
pelvis y tronco, llegue exhalando. La planta de los pies debe estar
completamente firme, asi como las palmas de las manos.
4.- Procure mantener varias respiraciones, busque que la pelvis esté en
la misma altura que las costillas bajas, que las piernas no pasen el
ancho de caderas, que las rodillas estén alineada con los tobillos. Los
codos deben estar alineado con los hombros, no más separados. Trate de
relajar la musculatura de la zona lumbar hasta la dorsal, mantenga la
postura con la fuerza de los brazos y de los muslos, no con los gluteos,
busque relajarlos. Sienta la apertura del pecho.
VARIACIONES
-En un comienzo puede separar las piernas más del ancho de cadera para liberar la zona lumbar y sostenenerse mejor.
-Si desea aumentar la dificultad puede apoyar elevar talones y quedarse
en la punta de los dedos de los pies, luego puede intentar estirar una
pierna hacia arriba. Otra variación es apoyar los antebrazos en el piso,
esto va a hacer que la intensidad de la retroflexión aumente, hágalo
con cuidado.
BENEFICIOS
Estimula el sistema nervioso al generar compresión sobre los
nervios-glándulas que salen de columna, fortalece la musculatura de
piernas y brazos, aumenta la flexibilidad de la columna .
PRECAUCIONES
Cualquier persona con problemas en la columna ya sea hernias,
escoliosis, entre otros. Tampoco deben realizarlo personas con problemas
de presión, arteriales o en las articulaciones de las muñecas,
tobillos.